Los ecosistemas proporcionan diversos servicios que sirven de soporte para la actividad humana (control de la erosión, ciclo de agua y nutrientes, pesca, ocio, etc.) y cuyo valor económico es muy difícil de estimar. Sin embargo, calcular los servicios que proporciona un ecosistema es verdaderamente útil en diversos sectores.
Jurídico:
Contenido indemnizatorio en procesos de responsabilidad civil por daños ecológicos y de responsabilidad ambiental (Directiva n.º 2004/35/CE, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de abril de 2004).
Empresas y ONG:
Planificación y ejecución adecuadas de las medidas de sostenibilidad ambiental, y cuantificación de la minimización de los daños ambientales en el valor del producto.
Estado y sus agencias:
Gestión y ordenación del territorio, aprobación de obras y proyectos.
Para realizar esta evaluación de forma coherente es necesario tener un elevado criterio profesional (best professional judgment) e interpretativo, una característica que destaca en Sinergiae Ambiente.
Esta evaluación se asienta en tres pilares:
- Cantidad de dinero que, actualmente, la población asigna a estos servicios (para los bienes que se venden en el mercado).
- Cantidad de dinero que la población está dispuesta a pagar para no perder cierto servicio o para restaurar cierto servicio (para los servicios que no se venden).
Cuestionarios y encuestas: el valor que la población está dispuesta a pagar cuando se le presenta un escenario hipotético o cuando tienen que escoger el mejor de varios escenarios hipotéticos haciendo una distinción económica entre los mismos